Wagner propone Alianza Energética Andina y destaca rol fundamental de la integración para el desarrollo

Wagner propone Alianza Energética Andina y destaca rol fundamental de la integración para el desarrollo

Convoca a la construcción de un nuevo “consenso” andino

Lima, 5 agosto 2004. La enorme importancia que tiene la consolidación de la Alianza Energética Andina y el papel central que está ocupando nuevamente la integración en las políticas de desarrollo de nuestros países, fueron destacados por el Secretario General de la Comunidad Andina, Allan Wagner Tizón, en una Sesión Solemne realizada ayer por la tarde, en homenaje al Presidente de Bolivia, Carlos Mesa, quien visitó la sede de la CAN, en el último día de su visita oficial al Perú.

Durante su intervención, con la que se inició la ceremonia, Allan Wagner se refirió a la Alianza Energética Andina, señalando que ésta podría constituir una gran fortaleza para el bienestar de nuestros pueblos y convertirse en un factor gravitante en las aproximaciones políticas y económicas andinas con terceros países.

Saludó, por ello, la firma del trascendental Tratado General de Integración y de Cooperación Económica y Social para la Conformación de un Mercado Común y la Carta de Intenciones para el Desarrollo Energético y la exportación de gas boliviano a través del Perú, suscritos por los gobiernos de Bolivia y Perú, y señaló que se trata de una decisión que fortalece a la Comunidad Andina y se convierte en un “núcleo de cohesión” para la integración y el desarrollo de nuestros países andinos.

Esta integración binacional entre Bolivia y Perú tiene un profundo significado estratégico, remarcó Wagner. Indicó, asimismo, que ambos países contribuyen así a ampliar los márgenes de autonomía de nuestras políticas de desarrollo e inserción internacional. Una de ellas, prosiguió, es la convergencia de las naciones andinas como actores relevantes en el mercado energético.

Citó como ejemplos de este potencial energético, las cifras que revelan que nuestros países andinos, en conjunto, poseen cuatro veces más petróleo que los Estados Unidos de Norteamérica, y ocho veces más que el MERCOSUR. También poseemos el 74% de las reservas de gas y el 75% de la producción de carbón de América Latina y el potencial de energías renovables es inmenso.

En otra parte de su alocución, Wagner destacó el papel central que está ocupando nuevamente la integración en las políticas de desarrollo nacional e inserción internacional, constituyéndose en un punto de apoyo y en un generador de fortalezas para acometer exitosamente los desafíos desiguales que nos plantea la globalización. El proyecto de integración andina es el espacio natural desde el cual se participará dinámica y competitivamente en el proceso de globalización, agregó.

Propuso, en concordancia con los acuerdos alcanzados por los presidentes andinos en la Cumbre de Quito realizada el mes pasado, la construcción de un nuevo “Consenso” a fin de hacer del desarrollo y de la democracia, verdaderos pilares del bienestar de nuestros pueblos.

Este nuevo “consenso” –en clara alusión a la voluntad de marcar distancia del “Consenso de Washington”- buscará alternativas creativas y viables para resolver los graves problemas que marcan la vida de millones de ciudadanos andinos, cuyas vidas están signadas por la desigualdad, la falta de empleo, la pobreza y la exclusión social.

Respecto a la demanda boliviana de recuperar su cualidad marítima, el Secretario General de la CAN recordó el Artículo 4° del Acuerdo de Cartagena, en el que se establece el compromiso andino de realizar los esfuerzos necesarios para “procurar soluciones adecuadas que permitan resolver los problemas derivados del enclaustramiento geográfico de Bolivia”. “Me he propuesto la tarea, como Secretario General, de contribuir a la puesta en práctica de ese compromiso”, remarcó.